Por www.mundolds.blogspot.com
Critica No Mormona:
Lo críticos señalan que Santiago 1:5, es usado incorrectamente por los SUD para justificar la oración acerca de la veracidad del El Libro de Mormón y fundamentalmente, somete la verdad a un sentimiento.
Respuesta SUD:
La Promesa de Moroni
El último profeta que se menciona en el Libro de Mormón, un hombre llamado Moroni, dio esta extraordinaria promesa a cualquiera que quisiera saber si el Libro de Mormón es verdadero:
“Y cuando recibáis estas cosas, quisiera exhortaros a que preguntéis a Dios el Eterno Padre, en el nombre de Cristo, si no son verdaderas estas cosas; y si pedís con un corazón sincero, con verdadera intención, teniendo fe en Cristo, él os manifestará la verdad de ellas por el poder del Espíritu Santo y por el poder del Espíritu Santo podréis conocer la verdad de todas las cosas.” (Moroni 10:4-5)
A medida que usted pida con sinceridad una respuesta a sus oraciones respecto del Libro de Mormón, Dios le contestará por medio del Espíritu Santo.
Los críticos han hecho una serie de ataques de la promesa de Moroni (Moroni 10:3-5): Ellos afirman que el orar acerca del Libro de Mormón no es una norma objetiva para determinar si el libro es verdad o no, y por lo tanto no debería ser de confianza.
La Oración como un medio para determinar la verdad
Los no mormones afirman que la Biblia es la única verdadera "vara" para determinar la verdad. Irónicamente, la Biblia refuta esto, y demuestra claramente que el Espíritu Santo o el Espíritu de la Verdad nos conducirá a la verdad (Juan 14:26, Juan 15:26, Juan 5:6). Al afirmar que la Biblia es la única fuente de verdad, los no mormones, de hecho, reducen al mínimo el poder de la oración y del rol que desempeña el Espíritu Santo.
Los Santos de los Últimos Días creen que el versículo más significativo de las escrituras, la escritura que ha tenido el mayor impacto en la historia del mundo se encuentra en Santiago 1:5-6:
“ Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dado. Pero pida con fe, no dudando nada. Porque el que duda es semejante a una ola del mar movida por el viento y echada”. (Santiago 1:5-6)
[Nota: Este versículo habla de pedir con fe sin dudar en nada, no sobre la sinceridad como señalan los críticos muchas veces]
Este versículo llevó al joven, José Smith a seguir ese consejo, para ofrecer una humilde oración de fe, estar dispuestos a aceptar la respuesta, no importa cuán difícil sea aceptar esta respuesta. Esa oración dirigió el inicio de la restauración del Evangelio.
Por medio de José Smith, el Señor ha puesto de manifiesto otras piezas para la oración. Uno de ellos es que debemos "estudiarlo" en nuestras mentes, y luego ir ante el Señor y pedir la confirmación de que nuestra decisión es correcta. Nos dio instrucciones de que si nuestra decisión es correcta, Nosotros sentiremos los frutos del Espíritu (Gálatas 4:6), y si no son correctos, tendremos un "estupor de pensamiento". Todo el que se pregunta en cada página, encontrará como respuesta en algún lugar entre la primera y la última, que el Libro de Mormón es verdadero. El Libro de Mormón es evidencia convincente de la restauración del Evangelio por medio de José Smith.
¿Qué hay de los que oran y no reciben la confirmación del Libro de Mormón es verdadero?
Moroni nos da los requisitos que deben cumplirse para obtener una confirmación:
“Y cuando recibáis estas cosas, quisiera exhortaros a que preguntéis a Dios el Eterno Padre, en el nombre de Cristo, si no son verdaderas estas cosas; y si pedís con un corazón sincero, con verdadera intención, teniendo fe en Cristo, él os manifestará la verdad de ellas por el poder del Espíritu Santo”. (Moroni 10:4)
No es suficiente simplemente preguntar: Hay que ejercer la fe en Jesucristo y demostrar un sincero esfuerzo por entender lo que está contenido en el Libro de Mormón. Es útil recordar la experiencia Oliver Cowdery, cuando trató de traducir,
“Pero he aquí, os digo que debes estudiarlo en tu mente, entonces has de preguntarme si es correcto, y si está bien, haré que tu pecho arda dentro de vosotros; por lo tanto, se sienten que es correcto”. (D. y C. 9:8)
Ardor en el Pecho
Los Críticos se quejan de que el medio para conocer la verdad para los Santos de los Últimos Días sea la "revelación" o un "ardor en el pecho" indicando que este es subjetivo, basado en la emoción, y por lo tanto poco fiable y susceptible del engaño a sí mismo. Los Críticos sectarios también le restan importancia a las experiencias espirituales, comparándolos con un "sentimiento calido", o simplemente algo que se siente, simplemente viendo una película de Hollywood.
“Y se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros mientras nos hablaba en el camino y cuando nos abría las Escrituras?” (Lucas 24:32)
” Se enardeció mi corazón dentro de mí; ardía fuego en mis reflexiones, y así hablé con mi lengua”. (Salmos 39:3 )
“Pero he aquí, te digo que debes estudiarlo en tu mente; entonces has de preguntarme si está bien; y si así fuere, haré que tu pecho arda dentro de ti; por tanto, sentirás que está bien”. (DyC 9:8)
Críticos sectarios incoherentes
Es extraño que los críticos sectarios fallen reclamando sobre el " ardor en el pecho". Después de la resurrección de Jesús, él caminó con dos discípulos en el camino de Emaús. Ellos no le reconocieron, pero le escucharon como " les declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían " (Lucas 24:27).
Después de partir el pan con ellos, Jesús se les revelo a los discípulos, y desapareció de su vista.
Curiosamente, no dijeron el uno al otro: "Deberíamos haber sabido que era Jesús, por su enseñanzas de las Escrituras." Más bien, dijeron: “Y se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros mientras nos hablaba en el camino y cuando nos abría las Escrituras?” (Lucas 24:32)
Asimismo, los críticos desestiman el testimonio de los discípulos de Jesús, debido a que era un "ardor en el pecho". Ahora nos preguntamos ¿Se caracterizan estas experiencias como una emoción al ver una película de Hollywood?
Malinterpretando una Declaración
Los críticos fundamentalmente malinterpretan mal la experiencia SUD sobre la revelación si piensan que es exclusivamente o principalmente una "emoción". El testimonio unido de la mente y el corazón es la clave en la doctrina SUD.
Una experiencia "espiritual " SUD tiene tanto o más contenido intelectual que simplemente las emociones de paz o de gozo. Oliver Cowdery recibió la siguiente revelación por medio de José Smith, y que alude a la revelación anterior dado a Oliver privadamente:
“De cierto, de cierto te digo: Si deseas más testimonio, piensa en la noche en que me imploraste en tu corazón, a fin de saber tocante a la verdad de estas cosas. ¿No hablé paz a tu mente en cuanto al asunto? ¿Qué mayor testimonio puedes tener que de Dios?” (D. y C. 6:22-23).
Observe que la información que habla de la "mente", y la paz que le siguió a esta. Y, la solución para las dudas, no se refiere a la dependencia de "un sentimiento", sino a una admonición de recordar una información específica que le fue comunicada antes.
Esto coincide con el patrón de revelación que se le explica más adelante a Oliver:
“ He aquí, no has entendido; has supuesto que yo te lo concedería cuando no pensaste sino en pedirme. Pero he aquí, te digo que debes estudiarlo en tu mente; entonces has de preguntarme si está bien; y si así fuere, haré que tu pecho arda dentro de ti; por tanto, sentirás que está bien. Mas si no estuviere bien, no sentirás tal cosa, sino que te sobrevendrá un estupor de pensamiento que te hará olvidar lo que está mal; por lo tanto, no puedes escribir lo que es sagrado a no ser que lo recibas de mí” (D. y C. 9:7-9).
Una vez más, el testimonio unido de la inteligencia y el corazón son esenciales. Si no están de acuerdo, entonces la revelación no ha sido confirmada sobre este asunto en cuestión. Cualquier persona que se basa exclusivamente en una "sensación" no comprenden o no obedecen las enseñanzas SUD sobre esta materia.
Para estar seguros, muchos misioneros hablan de cómo se "sienten" cuando oraban. Es fundamental, que entender mal estas experiencias como la asumen los críticos hostiles a menudo de que se refiere solamente a "sensaciones" o simplemente "emociones" es equivocado. Ello obstaculiza al miembro SUD en cierto sentido, ya que no hay una buena interpretación de lo que pasa y no conocen otras connotación seculares y si así lo desean podrían malinterpretarlas como los críticos.
Hugh Nibley descripción de la crítica es apropiado:
No puedo concebir cómo alguien puede adquirir conocimientos, por cualquier otro método que el suyo. Él no puede creer que un hombre ha experimentado algo que no ha experimentado. . . . "Nunca he visto una visión", dice el [escéptico], 'por lo tanto, José Smith nunca tuvo una. He visto sueños, por lo tanto, le permitirá eso”
Elder Dallin H. Oaks dijo la posición SUD sobre la revelación y "ardor en el pecho":
¿Qué significa un “ardor en el pecho”?. ¿Necesita ser un sentimiento de ardor calórico, como el ardor producido por la combustión? Si ese es el significado, nunca he tenido un ardor en el pecho. De seguro, la palabra ardor en esta Escritura significa un sentimiento de alivio y serenidad. Ese es el testimonio que muchos reciben.. Ésa es la manera en que la revelación surte efecto
En última instancia, como la Biblia nos enseña, confiemos en el Señor y el nos revelará la verdad:
”Confía en Jehová con todo tu corazón y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas”. (Proverbios 3:5-6)
¿Por que los mormones ponen la confianza en un “ardor en el pecho” mientras que los cristianos verdaderos ponen su confianza en la Biblia?
Si una convicción de la verdad viene solamente con la lectura de la Biblia y no del Espíritu Santo, uno no puede dejar de preguntarse ¿Por que hay tantas diversas iglesias? La Biblia enseña que uno no puede saber que Jesús es el Señor sin el Espíritu Santo (1 Corintios 12:3), que obra en la mente y el corazón y nos dirige a toda verdad (Juan 16:13)
Por ejemplo el Día de Pentecostés los 3 mil que fueron guiados hacia Jesús y los que se congregaron en la iglesia y fueron bautizados en la iglesia no se convirtieron al leer el Nuevo Testamento [No se había escrito todavía] no fueron convertidos estudiando las escrituras de los profetas antiguos. Cualquier fariseo y saduceo lo estuvieron haciendo por siglos y no aceptaron a Jesucristo.
Los 3 mil fueron convertidos por el Espíritu santo que les dio testimonio y como tan convenientemente lo expresa la Biblia "compungieron su corazón" (Hechos 2:37). Una vez que el proceso de la conversión comience, Pablo nos dice que Dios envía por delante el Espíritu de su hijo en sus corazones (Gálatas 4:6) ¿El sentir esa sensación del Espíritu en su corazón es ese el medio que hace que uno se convierta? El no manda que solo estudiemos las Escrituras para hallar la verdad como los críticos suponen (Hechos 17:11; 2 Tim. 3:16).
Alma un Profeta del Libro de Mormón nos enseña que esa confirmación nos llevará a un proceso espiritual que afecta el corazón:
"Y ahora os pregunto hermanos míos de la iglesia ¿Habéis nacido espiritualmente de Dios?¿Habéis recibido su imagen en vuestros rostros?¿habéis experimentado este gran cambio en vuestros corazones?” (Alma 5:14).
La convicción verdadera es una experiencia del corazón que no puede venir solamente al leer la Biblia, puesto que la Biblia como la conocemos se formó en el siglo 4 de nuestra era. Muchos cristianos tempranos murieron en el coliseo romano ¿Por qué estuvieron dispuestos a morir? Debido a la convicción su corazón [el cambio de corazón que experimentaron]. Siglos después el canon de la Biblia se concluyó, por tanto los primeros cristianos no tuvieron acceso a las escrituras, ya que las autoridades tenían prohibidas leer las escrituras. Los detractores se divierten explicando más allá las sensaciones del corazón, comparándolas con la indigestión de comer una pizza, quizás algunos de ellos están tan entumecidos a las sensaciones del Espíritu Santo que no se imaginan la sensación de tener un “ardor en el pecho”. "En lugar de eso procuran describir este acontecimiento con palabras comunes"
¿Si Santiago 1:5 quiere decir que podemos orar por "sabiduría", y qué es la sabiduría?
La palabra "sabiduría" es traducida de la palabra griega "sofia", y quiere decir " la capacidad de entender y en consecuencia la función...La sabiduría que Dios imparte a aquellos que esta cerca a Dios...El buen juicio en frente de los humanos y específicamente al cristiano exigen (práctica) sabiduría...Santiago 1:5 " (BDAG, pg 934).
Liddell y Scott dicen: " 1. Propiamente la ingeniosidad o la habilidad... 2. La habilidad en los asuntos de la vida común, juicio sensato, inteligencia, sabiduría práctica, etc... 3. Aprendizaje, sabiduría... 4. Entre los judíos, 'el temor al Señor es el principio de la Sabiduría' (Proverbio 1:7 LXX) " LyS, pp 1621-2.
Interesantemente, la versión hebrea de Proverbios 1:7 dice que "el Temor de Jehová es el principio del conocimiento". Los judíos así mostraban una equivalencia dinámica en su comprensión de "sabiduría" y "conocimiento".
En el Antiguo Testamento, la audiencia de Santiago estaba muy familiarizado con ello, esto lo aprendemos en Proverbio 2:6 " Porque Jehová da la sabiduría, y de su boca vienen el conocimiento y el entendimiento”.
El Diccionario Americano da 4 definiciones, ya sea que las dos siguiente se aplicaran: " 1. La habilidad para discernir o juzgar lo que es verdadero, correcto, o duradero; Entendimiento profundo. 2. Sentido común; Buen juicio: " es una característica de la sabiduría no hacer cosas desesperadas" " (Henry David Thoreau).
Así que ahora, sustituyamos la definición por la palabra, y veamos si podemos poner alguna claridad en lo que nos vemos le podemos pedir Dios que nos faltan, y cuál él a su vez da liberalmente:
“Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría [La habilidad para discernir o juzgar lo que es verdadero, correcto, o duradero], pídala a Dios, quien da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada”.
Así que si necesito la habilidad para percibir lo que es verdadero, puedo preguntar a Dios, y él liberalmente me dará esa habilidad. Extrañamente, sin embargo no hay en ninguna parte de la Biblia que diga "no pida" por cualquier cosa. El asunto es que los antimormones sienten que Dios es incapaz de dar a una persona " la habilidad a percibir o juzgar lo que es verdadero, correcto, o duradero; entendimiento profundo " de la veracidad del Libro de Mormón.
Cuando oímos a menudo a los antimormones que nos dicen que no hay un mandamiento de orar acerca de la Biblia. Esto no es completamente cierto, al menos para recibir a un testimonio espiritual de la Biblia. Recordemos nuevamente a los dos discípulos que caminaron con Jesús en el camino para Emaus, Jesús trató las Escrituras con ellos. La prueba de su veracidad fue explícitamente experimentada por los discípulos, la cuál escribió Lucas como una señal para reconocer la verdad para todos nosotros: Lucas 24:32 "Y se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros mientras nos hablaba en el camino y cuando nos abría las Escrituras?”
Supongo que podemos aceptar la afirmación antimormona de que no se haya sabiduría en pedir a Dios "La habilidad para discernir o juzgar lo que es verdadero, correcto, o duradero; o Entendimiento profundo. Sentido común y Buen juicio”, pero eso en verdad probaría que no son Bíblicos en su métodos.
Podemos asumir que aunque esta epístola se dirigió a quienes ya habían aceptado el Evangelio y tenían fe en el Señor (creyentes) es aplicable para toda persona que quiera hallar la verdad o saber juzgar que cosa es verdadera. Ademas tambien es posible que Santiago les quisiera redordar como se obtiene la verdadera sabiduria en contraste a la sabiduria del mundo.
Conclusión
El conocimiento de la verdad del Libro de Mormón no es algo que se obtiene por casualidad. Los misioneros enseñan a las personas el Libro de Mormón y les invitan a leerlas [estudiarlas en la mente] luego a pedir en oración a Dios [con fe, sin dudar, con un corazón sincero y con verdadera intención] para hallar sabiduría [La habilidad para discernir o juzgar lo que es verdad] y conocer la verdad por medio del Espíritu Santo [una confirmación tanto en la mente como en el corazón] .
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