La Conferencia General solo se transmitirá debido al coronavirus: El público no será invitado

La Primera Presidencia de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días publicó tres cartas hoy en respuesta a COVID-19. En la primera carta se menciona que las sesiones de la Conferencia General de abril solo serán transmitidas a todo el mundo gracias a la tecnología. El público no asistirá al Centro de Conferencias en Salt Lake City. A continuación la carta de la Primera Presidencia de la Iglesia
Queridos hermanos y hermanas:

Estamos profundamente preocupados por la propagación mundial de enfermedades causadas por COVID-19. Hemos sido asesorados por líderes gubernamentales, eclesiásticos y médicos de todo el mundo y hemos considerado en oración las circunstancias actuales. Queremos ser buenos ciudadanos globales y hacer lo que podamos para controlar esta enfermedad contagiosa. Estamos muy agradecidos por las muchas personas que están trabajando incansablemente para enfrentar esta amenaza para la salud. Oramos por ellos y por todos los que puedan estar sufriendo.

Para ayudar a controlar este problema, nos parece prudente limitar la asistencia a la próxima Conferencia General de abril de 2020. Planeamos llevar a cabo las cinco sesiones de esa conferencia en el Centro de Conferencias. Las autoridades generales, los oficiales generales y sus cónyuges, músicos, coros, técnicos y otros participarán según lo asignado. Pero, las reuniones de la conferencia serán llevadas a todo el mundo gracias a la tecnología. El público no será admitido en el Centro de conferencias en Salt Lake City, ni en centros de estaca o centros de reuniones en áreas donde el contagio es una preocupación. Las preguntas sobre otras grandes reuniones de miembros de la Iglesia serán respondidas en anuncios separados.

Vivimos en una época extraordinaria. El Señor nos ha bendecido con la tecnología y la capacidad de participar y recibir mensajes de los líderes de la Iglesia en todas las partes del mundo. Esta conferencia especial conmemorará el bicentenario de la Primera Visión y la Restauración del Evangelio de Jesucristo en estos últimos días.

Invitamos a todos a que continúen preparándose para esta conferencia. Al hacerlo, seremos bendecidos al escuchar la palabra del Señor y participar en una experiencia de la conferencia general que no solo será memorable, sino inolvidable.

Sinceramente,

La Primera Presidencia y Cuórum de los Doce Apóstoles.
Resumen de las tres cartas

En tres cartas dirigidas a todos los miembros de la Iglesia, la Primera Presidencia y el Cuórum de los Doce Apóstoles anunciaron:

1.- El público no será admitido en el Centro de conferencias en el centro de Salt Lake City para la conferencia general de la Iglesia de abril de 2020.

2.- Los misioneros programados para ingresar a los centros de capacitación misionera en Provo, Utah o Preston, Inglaterra, recibirán capacitación remota por videoconferencia. Otros centros de capacitación misional continuarán funcionando como de costumbre, pero no recibirán misioneros de regiones donde los funcionarios del gobierno están restringiendo la actividad.

3.- Se pospondrán conferencias de estaca y liderazgo y otras grandes reuniones en áreas de la Iglesia donde la enfermedad causada por COVID-19 es un desafío, incluyendo Asia, Europa y América del Norte. "Las grandes reuniones en otras áreas del mundo pueden continuar como de costumbre, a menos que las Presidencias de Área, que asesoran con sus líderes, indiquen lo contrario", escribió la Primera Presidencia y el Quórum de los Doce Apóstoles.

Una perspectiva histórica

La obra de la Iglesia ha sido impactada por epidemias en numerosas ocasiones en la historia. Por ejemplo, la conferencia general de abril de 1919 fue pospuesta debido a una epidemia de influenza a nivel nacional; La conferencia se llevo a cabo el primer fin de semana de junio, según el Church Almanac. La conferencia general de octubre de 1957 también fue cancelada debido a una epidemia de gripe.

En los últimos años, la obra misional en Hong Kong se vio afectado por el  brote de SARS en 2003 . Y luego por un brote de ébola en Liberia, los misioneros se mudaron de la nación de África occidental en agosto de 2014. Los jóvenes misioneros regresaron en septiembre de 2015. El élder David A. Bednar y su esposa, la hermana Susan Bednar,  viajaron a Liberia  en noviembre de ese año. La obra misional también se vio interrumpida en Madagascar tras un brote de la peste  en octubre de 2017.

En junio de 2009, la propagación de la gripe porcina llevó a los líderes de la Iglesia a cambiar los protocolos de recepción del CMM. Además, una sospecha de gripe estomacal / norovirus impactó a 250 misioneros Santos de los Últimos Días en el Centro de Capacitación Misional Provo en enero de 2013.

Fuente: noticias-mx.laiglesiadejesucristo.org, www.thechurchnews.com

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