David Palmer, o el hermano Palmer, como lo conocen sus alumnos, estaba hablando sobre la importancia de la obra misional en una clase de seminario que enseñó hace varios años cuando un alumno preguntó: "Es cierto que no tienes que ir a una misión para llegar al reino celestial ¿Verdad? "
Palmer dijo que podía ver a través de la pregunta del joven estudiante. "Sabía lo que estaba haciendo", dijo Palmer, compartiendo su historia en la página de Hi Five Live de Facebook. "Lo que en realidad hacia era que quisiera que todos en esa sala supieran que no tienen que ir a una misión".
Palmer quiso desechar la pregunta al decirle que sí, ir a una misión es un requisito para llegar al reino celestial, pero sabía que esa respuesta no era la correcta. Aturdido y sin estar seguro de qué decir, él simplemente dijo: "No, Tu no tienes que ir a una misión para llegar al reino celestial".
Después de la lección, la pregunta continuó pesando en la mente de Palmer. Estaba preocupado por la experiencia. No sabía qué sentir, y no sabía lo que podría haber dicho. "¿No tenemos que seguir al profeta para llegar al reino celestial?", Pensó.
Ofreció una pequeña oración, pidiendo la respuesta. Sabía que era una pregunta que era importante para mucha gente.
No hubo respuesta inmediata, y Palmer salió de su oficina. Mientras caminaba por el pasillo, sin embargo, una voz distinta entró en la mente de Palmer. Decía: "No tienes que ir a una misión para entrar en el reino celestial. Tienes que ir en una misión para que otras personas puedan entrar al reino celestial ".
La respuesta penetró en el corazón de Palmer. "Eso es todo", dijo en el video en vivo de Facebook. "Esa es la respuesta. . . . Son los dos grandes mandamientos. Es que amemos a Dios. . . y que amemos a nuestro prójimo, y no podemos pensar en la idea de llegar al reino celestial y no hacer lo que podamos para tratar de compartir el hermoso mensaje del evangelio."
Este artículo fue escrito originalmente por Alexandra Mortenson y fue publicado en www.ldsliving.com, con el título "Do You Have to Go on a Mission to Go to the Celestial Kingdom? A Seminary Teacher's Surprising Answer"
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