El sábado por la noche, el presidente Nelson habló en español cuando entregó un mensaje a los padres de las 5,600 personas que se reunieron para escucharlo en un coliseo de Lima.
"Por favor, enseñe a sus hijos sobre la expiación de Jesucristo", dijo el presidente de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. "Su Expiación es el evento más importante en la historia del mundo y el fundamento de nuestra religión. Todo lo demás en nuestra religión es secundario".
A mitad del día, el presidente Nelson habló con casi una décima parte de la fuerza misionera de la iglesia en una transmisión desde una capilla llena de Lima.
El día comenzó temprano, con una visita de 40 minutos al presidente peruano Martín Vizcarra. Los dos líderes acordaron que los Santos de los Últimos Días son una fuerza para el bien del país y discutieron las necesidades de las mujeres y los niños, los problemas humanitarios y su preocupación compartida por la corrupción.
"Fue un privilegio extraordinario para nosotros", dijo el presidente Nelson. "Fue muy cálido y amable, acogedor".
El presidente Nelson expresó su apoyo al trabajo de Vizcarra, quien ha hecho de la lucha contra la corrupción su máxima prioridad. Un juez de la Corte Suprema peruana huyó del país a principios de este mes luego de que la policía grabó conversaciones telefónicas que describían una red criminal de jueces que intercambiaban favores con políticos y empresarios, según la agencia Reuters . La justicia fugitiva fue capturada el viernes en España.
"Estamos preocupados por los problemas de corrupción en todo el mundo", dijo el presidente Nelson. "Aquí es donde (el presidente Vizcarra) está haciendo un gran esfuerzo. Realmente, es amado por la gente porque es anticorrupción".
Ambos hombres son todavía relativamente nuevos en sus posiciones. El presidente Nelson se convirtió en el 17avo profeta y presidente de la Iglesia en enero. Vizcarra asumió el cargo en marzo.
El presidente Nelson está haciendo su décima visita a Perú y es la primera parada en una gira por cinco países sudamericanos. Asistirá a la iglesia en Lima el domingo por la mañana, luego volará a Bolivia para un devocional allí el domingo por la noche.
Dijo que estaba impresionado con el progreso del Perú.
"He estado en Perú muchas veces y he visto muchas mejoras a lo largo de los años", dijo.
"Tenemos más de medio millón de miembros aquí, casi 600,000", dijo el presidente Nelson. "Así que es una fuerza importante para el bien en el país".
El élder Gary E. Stevenson, del Quórum de los Doce Apóstoles, se unió a la reunión con el élder Enrique R. Fallabella, guatemalteco nativo y presidente de la iglesia en la presidencia del Área del Noroeste de América del Sur, Guillermo Estrugo, Director del Área de Asuntos Públicos y Mark Woodruff, Presidente de Nelson secretaria personal. También estuvieron presentes el secretario personal de Vizcarra y un traductor.
"Mientras el presidente Nelson describía nuestra membresía", dijo el élder Stevenson, "el presidente Vizcarra asintió con la cabeza: 'Sí, sí, estoy muy consciente de ellos' y de nuestros jóvenes miembros".
La conversación se dirigió a los niños.
"Estaba muy preocupado por el bienestar de los niños", dijo el presidente Nelson, "y pidió nuestra ayuda para los niños del país para que no se sientan solos o en la pobreza".
"El presidente Nelson describió lo que hacemos y lo que enseñamos a nuestros niños", dijo el élder Stevenson. "Enseñamos a nuestros hijos a ser honestos, a ser sinceros, a seguir a Jesucristo, a honrar y sostener las leyes de la tierra y al gobierno".
Los dos presidentes también discutieron temas humanitarios, y el élder Fallabella describió el amplio impacto de la iglesia en Perú. La iglesia ha ayudado directamente a casi 5 millones de personas en esta nación de 31 millones desde 1985.
"Es consciente de que estamos tratando de llegar a los pobres en Perú", dijo el élder Falabella, "ayudándoles con las cosas que necesitan".
El presidente Nelson dijo que la delegación de la iglesia también elogió el trabajo de la Primera Dama de Perú, una reconocida educadora y campeona de mujeres y niños.
"Particularmente, ella es un maravilloso ejemplo del poder de una mujer en Perú", dijo.
"También le dije que oraríamos por él, y le encantó", dijo el presidente Nelson.
Él Habló sobre la visita durante el devocional el sábado por la noche en el Coliseo Mariscal Cáceres.
"Me agradeció la maravillosa conducta de los Santos de los Últimos Días", dijo el presidente Nelson. "Me agradeció por ser buenos ciudadanos. Y nos agradeció por la ayuda que los Santos de los Últimos Días brindan en el esfuerzo humanitario, ayudando a los pobres, entregando sillas de ruedas a quienes están inmóviles y agua fresca a los que no tienen, y más cosas. Nosotros, como autoridades generales de la iglesia, debemos agradecerles por ser tan buenos ejemplos ".
La hermana Wendy Nelson también habló en la reunión junto con el élder Stevenson y su esposa, Lesa, y el élder Falabella y la hermana Carmen Falabella.
"Todo en su iglesia pertenece a Jesucristo", dijo la hermana Nelson. "Los convenios son suyos, las ordenanzas son suyas, el poder del sacerdocio es suyo, los apóstoles son suyos y el profeta es su profeta, elegido por Él e instruido por Él."
El élder Stevenson dijo que los Santos de los Últimos Días pueden sostener a su profeta orando por él, estudiando sus palabras, escuchando los discursos de sus conferencias y siguiendo completamente sus inspiradas enseñanzas.
"Puedes compartir con tus amigos que tenemos un profeta en la tierra hoy", dijo.
"Sentí la influencia del Espíritu con mucha fuerza", dijo la hermana Karen Coloma, de 28 años, analista estadístico senior en Lima, donde se mudó con su familia hace dos años para escapar de los problemas políticos y económicos en Venezuela. El devocional fue la primera vez que vio a un profeta viviente en persona.
"El élder Stevenson, su esposa y la hermana Nelson testificaron que él es un profeta de Dios y habla con Dios", dijo Coloma, "y las experiencias que tuvieron con él fortalecieron mi testimonio de que realmente es un profeta y fue llamado por Dios y Se comunica con él y puede ayudarnos ".
Ana Vásquez, de 48 años, asistió a la reunión con su esposo y tres de sus hijos. No pudo encontrar palabras para expresar sus sentimientos durante la reunión, pero dijo que le dieron esperanza. Dijo que la descripción de la hermana Nelson de que su esposo había recibido revelación resonaba con sus propias experiencias de revelación personal.
"Me encantó que ella haya tenido ese privilegio y que nosotros también podamos tener ese privilegio", dijo Vázquez.
El presidente Nelson enseñó a los misioneros uno de sus libros favoritos en el Libro de Mormón, 3 Nefi. Dijo que hay una lección que se puede encontrar en Jesucristo y que solo se agrega a su mandamiento de ser perfecto como el Padre en el cielo después de que Cristo resucitó y apareció en las Américas.
"Hay una lección de perfección", dijo el presidente Nelson. "La perfección no es un desempeño sin errores. La perfección es ser cambiando de una persona mortal y falible a una persona que es inmortal, transformado y capaz de vivir en la presencia de Dios. No se desanimen si se encuentran cometiendo algunas fallas en su vida. Todos cometemos errores. Así es como nos arrepentimos, gracias al Señor Jesucristo, no podemos cometer errores por los cuales no podamos arrepentirnos, con una o dos excepciones notorias ".
El élder Stevenson invitó a los misioneros a usar el Manual de Misiones, las Escrituras y el manual Predicad Mi Evangelio como sus tres herramientas principales. También les indicó que extendieran una invitación en cada reunión con alguien interesado en el mensaje de la iglesia.
"Cada vez, después de cada invitación, prometes una bendición", agregó. "Te prometo que si prometes una bendición, atraerá a tus investigadores hacia el arrepentimiento y el bautismo. Esta es la forma de enseñar del Señor. Cada vez que hace una invitación, promete una bendición".
Los misioneros dijeron que estaban motivados por la reunión.
"Me encantó ver al profeta y poder escuchar todo lo que tenía para los misioneros", dijo el élder Leonardo Albarracín, de 19 años, de Quito, Ecuador, un converso de siete años que ha estado sirviendo en Lima durante cuatro meses y lo llamó "increíble". "Para ver a un presidente de la iglesia por primera vez. "Aprendí sobre la importancia de 'Predicad mi evangelio' y voy a trabajar con una mejor actitud y una sonrisa más grande".
La hermana Wara Fernández, de 19 años de Cochabamba, Bolivia, ha servido en la Misión Lima Este durante tres meses.
"No podía creerlo", dijo ella al ver al profeta del que enseña a otros en persona por primera vez. "Estaba realmente emocionado de verlo y escucharlo, y tuve otra confirmación de que él es un profeta de Dios".
Agradeció que los Nelson le enseñaron a los misioneros a visualizar a 100 ancestros fallecidos de cada persona con la que se reunían orando por ellos junto con el Presidente y la Hermana Nelson y 16 millones de Santos de los Últimos Días.
"Me siento realmente agradecida y bendecida", agregó, "y más emocionada de trabajar en la obra del Señor".
Fuente: deseretnews.com
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