Traducido por DPCS
Al igual que con los antiguos miembros a inicios de la iglesia restaurada, el Señor es misericordioso y aún no ha creado un "estándar" para el consumo de carne. Cada miembro y su conciencia resuelven el asunto.
Con respecto a la cuestión de por qué hacemos algunas cosas (como a veces comer mucha carne), y no otras (como no beber té y café), la razón probablemente tiene mucho que ver con el concepto de seguir el consejo de los profetas vivientes. El actual manual de Administración de la Iglesia dice que las "bebidas calientes" significa té y café, y prohíbe el uso de drogas ilegales, a pesar de que ni el "té", ni las drogas ilegales se mencionan explícitamente en la Palabra de Sabiduría. Al igual que en otras escrituras, nos basamos en las orientaciones de los profetas vivientes que nos ayudan a saber cómo Doctrina y Convenios, sección 89 se debe aplicar a nuestro tiempo. En lo que respecta a comer carne con moderación, sigue siendo una "palabra de sabiduría", pero, a diferencia de abstenerse del té o café, no se menciona en el manual actual y no se ha mencionado públicamente por las Autoridades Generales durante muchos años.
Joseph Fielding Smith hizo la siguiente declaración en relación con el consumo de carne: "Si bien es ordenado que la carne de los animales es para la alimentación del hombre, sin embargo, esta debe utilizarse con moderación. La redacción de esta revelación es perfectamente clara en relación con este tema, pero no siempre la observamos." [Joseph Fielding Smith, Doctrina de Salvación comp. Bruce R. McConkie, 3 vols., (Salt Lake City: Bookcraft, 1954–56), 148.]
De este modo, a cada miembro se le anima a hacer lo mejor posible, pero como en la época de José Smith, no se debe atacar o dictar sobre los demás. Si el Señor está disgustado con nosotros en forma individual, Él puede dar a conocer su voluntad por medio de la revelación. Si Él está disgustado con la Iglesia en su conjunto, la autoridad profética dará la corrección necesaria.
La Palabra de Sabiduría se aplicó de manera diferente en el siglo 19 que en la actualidad. No era la prueba terminante de becas como lo puede ser para el miembro moderno. Miembros y líderes lucharon con su aplicación, y los líderes de la Iglesia tenían claro que mientras que el Señor espera la adherencia perfecta a la Palabra de Sabiduría como un ideal, Él también fue paciente y comprensivo con todos, desde líderes y miembros, que tuvieron problemas para modificar sus hábitos.
En nuestros días, la Palabra de Sabiduría se aplica de una manera distinta a la hecha en la época de José Smith. La Palabra de la Sabiduría moderna prohíbe un gran número de otras drogas psicoactivas ilegales que habían recibido poca atención en el siglo 19.
Lecturas Recomendadas: El Origen De La Palabra De Sabiduría - Parte 1, El Origen De La Palabra De Sabiduría - Parte 2.
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