¿Cuál es la diferencia entre Doctrina, Principio y Aplicación?

Po el Élder David A. Bednar
Traducción Libre por Dastin Cruz

Este artículo es parte del capítulo 4 del libro "Increase in Learning" del Élder David A. Bednar que habla del "Entorno para un aprendizaje del Evangelio"

El aprendizaje es fundamental para el Plan de Salvación, para nuestra felicidad en la mortalidad y para nuestro progreso eterno... Este entorno se compone de tres elementos básicos: las doctrinas, los principios y las aplicaciones.

Doctrinas

La doctrina del Evangelio es verdadera; una verdad de salvación revelada por un amoroso Padre Celestial. Las doctrinas del Evangelio son eternas, inmutables y se relacionan con el progreso eterno y la exaltación de los hijos e hijas de nuestro Padre Celestial... Las doctrinas centrales del Evangelio de Jesucristo son relativamente pocos en número.

Las doctrinas del Evangelio contestan a las preguntas del "¿Por qué?" Por ejemplo, la doctrina del plan de felicidad responde a las preguntas del ¿Por qué estamos aquí en la tierra?, ¿Por qué el matrimonio entre un hombre y una mujer es ordenado por Dios? y ¿Por qué la familia es fundamental en el plan del Creador para el destino eterno de sus hijos?. La doctrina de la Trinidad nos ayuda a comprender el por qué podemos llegar a ser perfectos como nuestro Padre y su Hijo Jesucristo son perfectos (Véase Mateo 5:48; Nefi 12:48). La doctrina de la expiación explica por qué Jesucristo es nuestro mediador y abogado ante el Padre(Véase Timoteo 2: 5; Doctrina y Convenios 45: 3).

Las doctrinas del Evangelio restaurado se encuentran en los libros canónicos de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, las enseñanzas de los profetas y apóstoles vivientes y las declaraciones autorizadas y proclamaciones de la Primera Presidencia y el Quórum de los Doce Apóstoles. En última instancia, sin embargo, sólo el Presidente de la Iglesia y el Quórum de la Primera Presidencia tienen la autoridad para establecer las doctrinas de la Iglesia.

Cada uno de los tres primeros artículos de la fe hacen hincapié en una doctrina fundamental del Evangelio restaurado de Jesucristo. Tanto el contenido como la secuencia de las doctrinas que se presentan en los artículos son instructivas. Por ejemplo, el primer artículos de fe se centra en la Deidad. "Nosotros creemos en Dios el Eterno Padre, y en su Hijo Jesucristo, y en el Espíritu Santo." (Los Artículos de Fe 1:1)

El segundo artículo de fe destaca el Plan de Salvación y el papel de la Expiación en la superación de las consecuencias de la caída de Adán."Creemos que los hombres serán castigados por sus propios pecados, y no por la transgresión de Adán." (Los Artículos de Fe 1:2)

El tercer artículo de fe destaca el Plan de Salvación y el papel de la Expiación del Salvador para superar nuestros pecados individuales y las debilidades mortales. "Creemos que por la expiación de Cristo, todo el género humano puede salvarse, mediante la obediencia a las leyes y ordenanzas del Evangelio."(Los Artículos de Fe 1:3)

Las doctrinas del Evangelio son una fuente divina de poder e influencia para el bien. El presidente Boyd K. Paker explicó: "Si la verdadera doctrina se entiende, ello cambia la actitud y el comportamiento. El estudio de la doctrina del Evangelio mejorará el comportamiento de las personas más fácilmente que el estudio sobre el comportamiento humano... Por eso hacemos tanto hincapié en el estudio de la doctrina del Evangelio" (“Little Children,” 17).

En la declaración del presidente Packer, dos palabras son importantes y deben hacerse hincapie. La primera: la verdadera doctrina cambia la actitud y el comportamiento. La verdadera doctrina indica que proviene de Dios y es correcta y precisa. Las fuentes de estas enseñanzas son las enseñanzas de los siervos ungidos del Señor y las Escrituras. Las falsas doctrinas, opiniones personales, especulaciones y puntos doctrinales no causan y no pueden producir el mismo efecto justo en nuestra perspectiva y comportamiento.

Segundo: La verdadera doctrina, cuando se entiende, cambia la actitud y comportamientos. Es interesante observar que el presidente Packer enseñó que no sólo conocer la verdadera doctrina nos cambie. En lugar de ello, la enseñanza debe ser entendida. Como ya comentamos en el capítulo 2 [del libro], la palabra entendimiento a menudo está vinculada y /o asociada en las escrituras con el corazón y se refiere a un resultado o a una conclusión revelada. Por lo tanto, la verdadera doctrina cuando se confirma en el corazón como verdadera por el testimonio del Espíritu Santo cambia la actitud y el comportamiento. El conocimiento de la verdadera doctrina es necesaria pero no suficiente. Entender la verdadera doctrina, tanto en nuestra mente como en nuestro corazón es esencial para las actitudes y acciones rectas.

Las doctrinas básicas del Evangelio son el fundamento espiritual para todo lo que aprendemos, enseñamos y hacemos; y una fuente vital de poder y fortaleza a medida que nos esforzamos por llegar a ser lo que el Señor espera que seamos. Por ejemplo, la importancia eterna de las relaciones sexuales y el matrimonio eterno sólo puede entenderse adecuadamente en el contexto del Plan de Felicidad de nuestro Padre Celestial. El énfasis de la institución del matrimonio, sin vincularlo adecuadamente a la doctrina sencilla y fundamental del Plan no puede proporcionar la suficiente orientación, protección y esperanza en un mundo confuso en estos temas vitales. Un conocimiento y testimonio del Plan de Salvación lleva a los hombres y a las mujeres a tener esperanza y a prepararse para casarse en la casa del Señor, mediante el fortalecimiento de los compromisos de honrar el convenio sempiterno del matrimonio y superar el miedo e incertidumbre que hace que algunos eviten o posterguen el matrimonio. Como hemos aprendido de las enseñanzas de Alma, Dios dio a los hijos de los hombres mandamientos "después" de haberles revelado el plan de redención (véase Alma 12:32).

En los tiempos actuales y venideros, sólo el Evangelio restaurado de Jesucristo tiene las respuestas a los importantes y eternos porqués del alma... la respuesta a los porqués más fundamentales es fácil de encontrarlas en la doctrina de Cristo.

Principios

Un principio del Evangelio es una guía basada en una doctrina dirigido al adecuado ejercicio de albedrío moral. Los principios son subconjuntos o componentes de verdades más completas del Evangelio. Los Principios sirven de guía. Los principios correctos, además de que siempre están fundados y edificados en las doctrinas, no cambian y responden a las preguntas del "¿Qué?" Muchos principios pueden surgir y ser asociados con una doctrina sencilla, como se ilustra en la Figura 1.

Un principio no es un comportamiento o una acción específica. En vez de eso, los principios proporcionan pautas básicas de comportamiento y acción. Por ejemplo, el cuarto Artículo de Fe dice: "Creemos que los primeros principios y ordenanzas del Evangelio son: primero, Fe en el Señor Jesucristo; segundo, Arrepentimiento; tercero, Bautismo por inmersión para la remisión de los pecados; cuarto, Imposición de manos para comunicar el don del Espíritu Santo." (Los Artículos de Fe 1:4)

Los tres primeros Artículos de Fe identifican las doctrinas fundamentales del Evangelio restaurado. El cuarto artículo de fe, sin embargo, relaciona los principios; indicando cómo cumplir con: la doctrina.

Los dos primeros principios que emanan de la doctrina de la Expiación son la fe en el Señor Jesucristo y el arrepentimiento. La Expiación explica el por qué, y los principios se centran en el qué. Por lo tanto, los principios de la fe en Jesucristo y el arrepentimiento nos da las guías necesarias para que la Expiación puede llegar a ser efectiva en nuestras vidas.

Elder Dallin H. Oaks, ilustro la importancia de los principios en su instrucción a los poseedores del Sacerdocio Aarónico en una reunión del sacerdocio en una conferencia general de la Iglesia. Describió el principio de que no haya distracción y demostró que un poseedor del Sacerdocio Aarónico nunca debe querer hacer nada en apariencia o en comportamiento que pueda desviar a cualquier miembro de la Iglesia de su adoración o renovación de sus convenios. También hizo hincapié en los principios relacionado con el orden, la limpieza, la reverencia y la dignidad.

Curiosamente, el Elder Oaks no dio a los jóvenes una larga lista de cosas "para hacer" y "para no hacer". En su lugar, él explicó el principio, con la expectativa de que los jóvenes, sus padres y sus maestros utilicen sus propias capacidades, criterios e inspiración para seguir esa guía.
No voy a sugerir reglas detalladas, dado que las circunstancias en los diferentes barrios y ramas de nuestra Iglesia mundial son tan diferentes que una regla especifica que pueda requerirse en cierto lugar quizás sea inapropiada en otro. Mas bien sugeriré un principio basado en las doctrinas. Si todos entienden este principio y actúan en armonía con él, existirá muy poca necesidad de reglas. Si se necesitaran reglas o consejos en casos individuales, los lideres locales pueden proporcionarlos, en armonía con las doctrinas y los principios correspondientes.[El Sacerdocio Aarónico Y La Santa Cena - Liahona Nov. 1998 ]
El profeta José Smith enfatizó el poder de los principios rectores cuando se le preguntó cómo él era capaz de guiar y gobernar a los Santos de los Últimos Días de manera eficiente. Él respondió: "Les enseño principios correctos y ellos se gobiernan a sí mismos" (citado por John Taylor, Millennial Star, 15 Noviembre de 1851, 339).

Aplicaciones

Las aplicaciones son comportamientos reales, medidas activas, prácticas o procedimientos mediante los cuales los principios del Evangelio son exaltados en nuestras vidas. Mientras que las doctrinas y los principios no cambian en nada, la aplicación de por sí puede generar cambios de acuerdo a las necesidades y a las circunstancias. Las aplicaciones responder a preguntas del "¿Cómo?". Muchas aplicaciones pueden evolucionar y unirse en un solo principio. En la Figura 2, observe el gran número de comportamientos y acciones específicas que se han extendido del principio de la fe en Jesucristo.
Según lo enseñado por el Elder Oaks, el principio de no distrar, por ejemplo, se puede aplicar de forma adecuada cuando los poseedores del Sacerdocio Aarónico evitan el extremismo en el vestir, en su corte de cabello, en su forma de hablar y de comportarse. Los tipos de posibles distracciones que deben evitarse obviamente puede variar en Alabama, para África, y para Argentina, aunque los principios son siempre los mismos, las aplicaciones pueden variar de acuerdo a las necesidades y las circunstancias.

Uso del Contexto

El contexto formado por las doctrinas, los principios y las aplicaciones es una herramienta multipropósito que puede ser utilizado para mejorar nuestro aprendizaje del Evangelio y también puede ser de gran valor, cuando oramos aplicamos el principio de la oración y la norma de pedir, buscar y llamar.

Por favor, no miren y usen este contexto como un conjunto rígido de las definiciones o como una fórmula que permita obtener las respuestas "correctas" sobre qué aplicaciones y principios están asociados con una doctrina específica del Evangelio. De hecho, algunos lectores quizás esperen un apéndice al final de este libro en el que se muestra una categorización rígida y exhaustiva de las doctrinas, principios y aplicaciones. Pero no existe una lista definitiva para identificar y clasificar adecuadamente todos los principios y doctrinas del Evangelio. Y sinceramente tal lista tendría poco valor. Por otra parte, el propósito de esto es hacer explorar, experimentar y ejercer la fe en el Señor a medida que uno mismo aprende "la doctrina del reino" (D. y C. 88:77) y llega a "conoc[er] los verdaderos puntos [de] la doctrina [del Salvador] "(3 Nefi 21: 6) al hacer preguntas y buscar respuestas... Algunos temas del Evangelio, aparentemente se pueden categorizar apropiadamente tanto como principios y la doctrina. Por ejemplo, La obediencia ¿Es un principio o doctrina? Estudiar las Escrituras ¿Es un principio o una aplicación? Estos son el tipo de preguntas que la estructura del Evangelio pretende ayudar a identificar y explorar.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

@mormonorg